“Su vida fue amenazada (de la fiscal departamental de Tarija, Sandra Gutiérrez) y está siendo amedrentada. Por temas de seguridad se está manejando con cautela, sobre todo las notificaciones concernientes a la orden de aprehensión contra Evo Morales”, informó el viceministro de Seguridad Ciudadana, Roberto Ríos.
El viceministro refirió que la orden de aprehensión fue emitida el 16 de octubre, después de que Morales no se presentó a brindar su declaración informativa para responder a la denuncia en su contra, por el delito de trata y tráfico agravado, pero también dijo que la Policía aún no cuenta con una notificación formal.
El exmandatario es investigado por una relación que mantuvo con una menor de 15 años, en 2015, de la cual nació una niña, de acuerdo con la investigación. La mujer y su hija son buscadas por la Policía, ambas desaparecieron después de haber sido víctimas de un intento de secuestro en el municipio fronterizo de Yacuiba, Tarija. El jueves 19 de diciembre la Dirección Nacional de Migración activó la alerta migratoria contra el líder cocalero, para evitar que salga del país.
Dirigentes afines a Morales públicamente advirtieron al Gobierno que, si tratan de ejecutar la orden de aprehensión contra su representante, podrían correr ríos de sangre. El dirigente cocalero está resguardado en instalaciones de la radio Kawsachun Coca (en Lauca Ñ) trópico de Cochabamba desde inicios de octubre. Para acceder a él, se deben pasar tres anillos de seguridad compuesto por cocaleros y su seguridad privada, conformada por extranjeros.
Publicado el 24-12-24