El estadio Hernando Siles está remozado. A pesar de la falta de recursos económicos, el Servicio Departamental de Deportes (Sedede) de La Paz se las ingenió para conseguir fondos y hacer que el principal escenario deportivo de Bolivia cumpla con todas las exigencias de Conmebol y FIFA para la disputa de partidos internacionales. Según la administración, se cumplió a cabalidad con lo que estaba planificado, con  una inversión de dos millones de bolivianos.

“Desde que llegamos al Sedede sabíamos que teníamos una misión muy fuerte”, dijo el director el ente, Fernando Trino, quien confesó que los ingresos en la institución “no son grandes”, por lo que tuvo que acudir a la empresa privada para lograr los recursos que permitan la modernización del escenario miraflorino.

“La inversión bordea los dos millones de bolivianos. No teníamos esos recursos, por lo que tuvimos que buscar auspicios e intercambio de servicios, no nos quisimos quedar con los brazos cruzados y decir que no hay dinero, peor en esta última etapa en la que afectó a todos la pandemia del nuevo coronavirus”, contó.

Recordó que los primeros trabajos fueron en el campo de juego, en el que se realizó una labor de nivelación con maquinaria especial y se mejoró el drenaje con ayuda de otros equipos que fueron alquilados.

“El campo de juego   no estaba en las mejores condiciones y tuvimos que traer, desde Santa Cruz, una máquina para hacer la nivelación. Alquilamos otra para remover la cancha y que se cuente con un buen sistema de drenaje, eso ayudó a que tengamos un buen terreno deportivo. La megafonía era otro problema, la que teníamos no era de las mejores, pero ahora contamos con una de última generación que trabaja en cinco niveles. En el primero los anuncios  se pueden escuchar en  todos los  pisos, pero se puede regular para algún sector en específico, como el quinto piso y los camarines”, narró Trino.

Señaló que otro tema fundamental que se tenía que mejorar era la iluminación y recordó que se contaba con luminarias de haluro que tardaban entre 25 y 35 minutos en encender, tenían que calentar, pero se cambió a luz led que llega a 1.300 luxes de intensidad y Conmebol exige 1.200.

Para los juegos internacionales ahora se exige una banca de suplentes para 23 personas, el Siles contaba con espacio para 18, pero se lo amplió y ahora las casamatas tienen 25 espacios.

“Tenemos la sala del VAR, que gracias a Dios fue halagada por la gente que la utilizó durante el partido frente a Argentina. Teníamos que poner fibra óptica y lo hicimos en todo el edificio central. Modernizamos los cuatro vestuarios, contamos con 12 cabinas nuevas de transmisión radial, tenemos la sala antidopaje que antes era un espacio modesto y hoy son dos salas totalmente equipadas, con vidrios traslucidos como manda la norma, duchas modernas y con sauna habilitado ahí adentro”, puntualizó el director.

Señaló que se cuenta con 200 megabytes de velocidad de internet gracias a un acuerdo de intercambio de servicios con la empresa Sirio, además la Universidad Tecnológica Boliviana (UTB) construyó las 12 cabinas de transmisión y The Games se ocupó de los camarines.

En principio se tenía planificado pedir el apoyo a los clubes Bolívar, The Strongest y la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) para que se ocupen de los vestuarios y los personalicen, “no se pudo concretar, por eso lo hicimos por nuestra cuenta. Hablamos con la gente de la empresa The Games, que nos dio la opción del intercambio. Para cada partido ponemos los bloques (habitáculos) y pedimos a los equipos las fotos de sus jugadores para pegarlas, lo  que hacemos es ambientar el vestuario con los colores del equipo que usará el mismo”.

Se cumplen con los protocolos de bioseguridad, ya que la empresa Cairos MS es la que se encarga de desinfectar los ambientes antes de cada partido. Se utilizan algunos químicos y vapor para “mantener los espacios limpios”.

FUENTE_: PAGINA SIETE