El Secretario Ejecutivo de la Central Obrera Boliviana (COB), Juan Carlos Huarachi, se retractó de sus amenazas de tomar con sus seguidores la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP). “Lo que se dice radicalizar, no es tomar, asaltar. Hay medidas que siempre se han hecho, se han crucificado, han entrado en huelga de hambre, se han tapiado, son las medidas radicales para exigir que de una vez traten nuestros proyectos sociales”, dijo Huarachi luego de reunirse con el jefe de bancada “arcista” Jerges Mercado.  

Sin embargo, hace tres días, declaró lo contrario: “La marcha va a terminar con la toma física de la Asamblea Legislativa. Y si no quieren los titulares que asuman sus suplentes. Así nomás es, y si los suplentes no quieren, carajo, vamos a plantear cierre del Parlamento”, dijo exaltado el líder de la COB y aliado del Gobierno. 

Huarachi ahora señala que fue “tergiversado”, incluso dijo ahora que la COB demanda la aprobación de leyes sociales y de créditos internacionales que estén “justificados” como  la construcción de carreteras, mientras que el resto de los proyectos tendrán que justificarse por las autoridades respectivas. 

Incluso cuando se le preguntó qué pasará si los diputados no aprueban los créditos por mil millones de dólares que reclama el presidente Luis Arce, el líder de la COB, respondió: “son sus decisiones de ellos, tampoco hemos venido a obligarles, a imponer”. Aunque, si obligará a la aprobación de leyes sociales, como la reforma a la ley de pensiones. La Central Obrera exige esta norma para mejorar las rentas de jubilación, aunque médicos y maestros la rechazan porque establece la jubilación obligatoria a los 65 años.

Fuente: Radio Líder