Para Navidad, abuelitos piden regalos y llamadas de sus hijos
La Paz, 12 de diciembre de 2018 (www.radiolíder97.bo) .- “Tengo mis hijas, pero nunca me llaman. Se han olvidado de mí”, contó Eusebia de 75 años, entre lágrimas. Pidió para Navidad una frazada y una chompa, pero también sueña con recibir como un regalo una llamada telefónica de una de sus hijas.
Al igual que Eusebia, más de 150 abuelitos y abuelitas de la Casa Amandita del Adulto Mayor esperan recibir para Navidad un regalo de un persona de buen corazón.
Se trata de la campaña “Los Abuelitos también sueñan”, que busca que gente solidaria cumpla el pedido para Navidad de los adultos mayores.
La administradora del hogar, Marlene Loza, explicó que para impulsar la campaña, difunden los pedidos y los deseos de los adultos mayores en la página de Facebook de este centro. De esa manera, la gente solidaria podrá entregar los obsequios.
“Ellos piden chalecos, chompas, zapatos, frazadas y cosas muy simples. Se sienten muy solos porque la mayoría vive en la calle o su familia se olvidó de ellos”, señaló.
Teodora es otra adulta mayor que espera ansiosa que uno de sus siete hijos se acuerde de ella. “Sería bonito que venga, pero no viene. Ojalá que me visite y me regale una ollita a presión o una chompita porque me hace frío. Ojalá que alguien me regale, por favor”, expresó.
La campaña ya se realiza por segunda vez. Loza dijo que espera la solidaridad de la ciudadanía. “El año pasado nos fue muy bien”, aseguró.
El hogar sólo recibe el apoyo de la empresa La Francesa que dona víveres semanalmente para los adultos mayores.
Máximo es otro de los ancianos que espera la atención de su familia y de la ciudadanía. “Vivo en la calle”, dijo y contó que gana unas monedas cuando ayuda a acomodar los puestos de las vendedoras de maíz para palomas en la plaza Murillo.
Loza explicó que Casa Amandita por falta de recursos aún no cuenta con dormitorios para albergar a los adultos mayores. “Sólo contamos con un comedor para darles desayuno y algo de almuerzos. También tenemos abogados y médicos voluntarios que les dan un servicio gratuito”, indicó.
Los adultos mayores visitan el hogar diariamente, se quedan hasta antes del mediodía o más tarde. Luego salen a ganar dinero con la venta de dulces o manualidades que aprenden a elaborar en el hogar. La Casa Amandita se encuentra en el primer nivel del centro comercial ubicado en la plaza Camacho.
“Me siento sola. Andamos con mi esposo, pero cuánto quisiera que mis hijas se acuerden de mí. Que me llamen, aunque no vengan a visitarme”, dice Eusebia, quien espera cumplir su sueño en esta Navidad.
FUENTE : PAGINA SIETE